21/8/07

Es mucho o es poco?

Hoy me pasó una cosa curiosa esperando el metro en el aeropuerto para volver del trabajo.

Me encontró una señora que también esperaba en la línea 8. Noté que se acercaba y ya pensé "Oh, mierda, ahora me preguntará que cuándo acabarán las obras de la línea uno" y es que la gente ve una corbata y enseguida supone que trabajas allí donde te encuentres.

Pero esta vez no. Se acercó un poco tímida y me dijo "Hola hijo, te acuerdas de mí?". Por supuesto que no me acordaba. Por supuesto que habría jurado que era la primera vez que la veía, y de hecho hubiera achacado el malentendido a la edad de la señora, pero ella continuó: "Si no llega a ser por ti me quedo en tierra. Perdí la conexión a Valencia la semana pasada, ¿no te acuerdas?".

Por más que me esforcé no pude recordarla ni a ella ni a qué momento se refería, pero sí, yo trabajaba el día que me aseguraba que la atendí. Me quedé el resto del trayecto pensando en cómo la señora se acordaba de un detalle tan insignificante como fue para mí cambiarla de vuelo, y sin embargo a ella le pareció algo a recordar. Empecé a pensar en que a lo largo del día todos tenemos cientos de relaciones que son como una balanza. A veces para una parte es super importante y para la otra es insignificante o viceversa.

También me paré a pensar lo que me molesta cuando me pasa a mí lo que le pasó a a la señora. Encontrarme con alguien que, a pesar de la poca relación me pareció intensa y que la otra persona no sea ni capaz de recordarla. Pero bueno, luego pensé que el trayecto del aeropuerto a casa no era suficiente para arreglar el mundo y que esa balanza seguirá ahí mañana.